España ha tenido su regalo de Reyes: una preciosa bebita latina que alegrará nuestro futuro con bailes sandungueros y que contribuirá a pagar nuestras pensiones.
Lo de menos es que haya nacido en un lugar poco apropiado para los alumbramientos (un portal de vecinos), lo importante es que todos estamos felices. En un principio la niña iba a nacer en la calle, pero unos españoles poco respetuosos con las decisiones de la madre migrante la obligaron a entrar en el portal para realizar la expulsión fetal.
Aquí se puede ver un vídeo en el que nos enteramos del nombre de la feliz niña alumbrada: Daquilsia.
